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El encuestador Alfredo Keller asegura que al Gobierno le será imposible conquistar la clase media. El presidente Chávez aseguró que no le regalaría este sector a la burguesía. Los estudios revelan que las políticas públicas del Ejecutivo dinamitan ese estrato del electorado
Nailibeth Parra Carvajal
laverdad.com
Sin el “Patria, socialismo y muerte” y sin el rojo rojito, al parecer lo “radical de la Revolución bonita” desaparece. El cambio de discurso y de imagen que propuso el presidente Hugo Chávez el día de su cumpleaños trata de convencer a la clase media y profesional venezolana, que históricamente ha estado en su contra.
Según Alfredo Keller, director de la firma Alfredo Keller y Asociados, cuando el jefe de Estado dijo: “No podemos regalarle la clase media a la burguesía”, se dirigía a 45 por ciento de la población. “El Presidente se refiere a la clase media bajo un concepto político. Se refiere a los que están disgustados con la situación del país y con las políticas públicas, que sienten que el Gobierno es una amenaza para su estabilidad y desarrollo”.
Tradicionalmente, este reglón del electorado se identifica en los comicios con el sector opositor. El viernes, Chávez dijo que su gobierno necesita corregir la percepción que las pequeñas empresas serán absorbidas por el Estado. “Tenemos que asegurarnos de que nadie crea eso. Tenemos que convencerlos de nuestro proyecto real, de que necesitamos a este sector y que queremos reconocer su contribución”.
Aunque para Keller, no es del todo literal que los chavistas sean pobres y que los opositores sean ricos, sí es una realidad que el proyecto político de los últimos 12 años dinamitó a la clase media y alta, y los obligó incluso a salir del país.
“Mientras más se sube de clase más opositor se es, porque hay mayor racionalidad y hay menor independencia del Estado”, sostiene el experto, para quien es un “maquillaje” la táctica de eliminar el rojo y la “muerte” de la política oficialista.
Imposible
“Conquistar la clase media no es viable. Se le opone las políticas públicas del Gobierno. La gente de la clase media no se come los cuentos de las promesas, revisan la realidad y por tanto la rechazan”, acuerda Alfredo Keller, al tiempo que asume que en estos momentos cerca de 50 por ciento de la población venezolana pertenece al estrato popular bajo, que históricamente fue chavista, y que desde 2007 se viene disgregando.
“Tenemos varios años que el Gobierno va en franca minoría ¿Y cómo lo compensan? Con la abstención electoral de un segmento intermedio que llaman Ni-Ni. En realidad el chavismo lo que está jugando es a la abstención de la clase media”.
Por estratos
Clase Porcentaje
Baja-marginal 12-15%
Popular 35%
Media baja 30%
Media-Media 15%
Media-Alta 5%
Ciertamente en elecciones los intereses encontrados a filo, presentan ofertas y proyectos con el fin de ganarse a la clase media y media baja, es decir aquellos sectores privados que trabajan en diferentes sectores: en educación, en el vestuario, en los servicios públicos,ventas,etc. Las señales que el gobierno ha dado para ese sector y subsectores ciertamente no han sido son positivas. Aumentos salariales que no son viables al rendimiento económico que les permite capitalizar su empresa. Cuba está desde hace unos años deshaciéndose de población trabajadora que dependía del Estado para subsistir y fomenta la creación de empresas privada individuales, familiares o colectivas pero que les falta lo esencial para tal cambio: el capital de inicio. La pequeña y medianas empresas siempre han estado bajo la sombra de los intereses de las grandes empresas y el capital, pero hoy claro frente a la pérdida de su hegemonía también ofrecerán el oro y el moro a la clase media. Una clase que no ha estado al margen de la política de un país y ello la hace interesante.
ResponderEliminarSin embargo promesas electorales que tendrán duraciones cortas y no estratégicas generaran mas descontento, independientemente de quien las ofrezca. Las encuestas se hacen para aparecer bello al que no lo es y me refiero a todo tipo de encuestas.