La trampa de las encuestas es clara, de entrada es bajarle el peso a la responsabilidad de HCh ante la grave situación que vive el país; de segundo plato, acondicionar al electorado que no es posible ganarle en el 2012
Gonzalo García Ordónez
@gongaro
Talcualdigital.com
Transcurría el año del Referendo Revocatorio cuando se acercó a la CD un funcionario de inteligencia: "qué hace el dueño de IVAD asesorando a la Coordinadora Democrática, acaso no saben que él trabaja para el gobierno".
En efecto, ese año el CNE movilizó arbitrariamente un millón quinientos mil electores fuera de sus centros de votación... a donde le dio la gana. Fue a IVAD a quien la Coordinadora Democrática le encargó la tarea de medir ese impacto en los resultados finales.
Seijas dijo que el impacto real era de sólo 57 mil votos.
El referendo se perdió y qué casualidad la diferencia de votos. Errores se han cometido y seguro que se cometerán muchos más pero lo imperdonable es seguir pasando por pendejos y de la mano de encuestadoras que abiertamente trabajan para el gobierno.
Dónde está la ética que la población reclama, dónde está la sabiduría y malicia que esperamos de los líderes políticos. IVAD tradicionalmente, y es sabido por todo el mundo, le trabajó al mundo opositor pero cuando escogió trabajarle al gobierno entró en un dilema ético insoluble.
No se puede trabajar para dios y para el diablo. IVAD compone las cifras a la carta. Por ejemplo, el candidato de UNT en las primarias de Táchira fue Gustavo Azocar e IVAD lo daba ganador. Llegó en tercer lugar muy por detrás de César Pérez Vivas. Podríamos dar infinitos ejemplos, el último en las elecciones del 26S.
La técnica usada por el gobierno es mantener a HCh muy cerca del 50%, así que no cause sorpresa un resultado torcido. Antes de las elecciones de gobernadores y alcaldes otro de los encuestadores del gobierno dijo "que quería dar algunos daticos". El fulano encuestador afirmó que a duras penas se ganaría la gobernación de Zulia y que Ledezma llegaría después de la ambulancia. La realidad demostró ser otra.
La trampa de las encuestas es clara, de entrada es bajarle el peso a la responsabilidad de HCh ante la grave situación que vive el país; de segundo plato, acondicionar al electorado que no es posible ganarle en el 2012. Me preocupa que Teodoro siga en esa cuerda floja, máxime cuando es un gran generador de opinión pública.
IVAD pronosticó que el RC lo ganaba HCh y perdió; pronosticó un desastre para la oposición en la elección de gobernadores y erró; pronosticó que el gobierno ganaba las elecciones del 26S y por el contrario la oposición obtuvo 52% de los votos.
No creo en IVAD, ni en sus números. Por cierto Seijas padre trabaja con IVAD y ahora creó otra empresa para que un familiar atienda a la oposición.
Las cosas hay que decirlas con claridad, aquí se está jugando el destino de millones de venezolanos a manos del comunismo, lo único que se puede aceptar es la verdad. Teodoro, esta es una contribución a la transparencia que los venezolanos deseamos tener en los procesos electorales para asegurar una salida pacífica.
Libia es una demostración de la mentira.
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