Padre José Palmar Morales
Primero, porque el “otro candidato” prácticamente desde 1.998 anda en campaña electoral de manera impolítica, inminente, excesiva, irrespetuosa, ilegal y anticonstitucional; muy a pesar de la política oficialista reciente de intentar refrescar su nombre e imagen retirándolos de las vallas, pancartas y avisos, su grosero y arbitrario uso, y abuso, en las cadenas presidenciales colapsa y avasalla los medios de comunicación con el reciclaje de las promesas electorales, que se tornan demagógicas, populistas y fraudulentas. Ante esta ventaja urge y necesita la UNIDAD DEMOCRÁTICA a través del futuro PRESIDENTE CONSTITUCIONAL expresar a toda la población venezolana de manera contundente y explícita el proyecto de País, Nación, Estado y Gobierno contenido en la Constitución Bolivariana de Venezuela de 1.999, proyecto que ha sido vapuleado, violado y abolido de hecho y fuera del derecho por el régimen autocrático y centralista del “otro candidato” que se quiere reelegir nuevamente después de más de una década en el poder.
Segundo, generalmente un proceso electoral a nivel de “primarias” genera una serie de fricciones internas, divergencias políticas, lesiones mediáticas y malestar partidista que para ser sanadas con madurez política y salud espiritual se hace necesario contar con el factor temporal justo, suficiente y razonable que permita la reconciliación y la armonía perfecta, para así mostrar la sensación y el testimonio cierto de la unidad, fraternidad y correlación de fuerzas con sentido plural y participativo. No se puede correr el riesgo de iniciar una campaña electoral con heridas políticas no cicatrizadas y mucho menos que destilen las gotas de los resentimientos, antipatías y aversiones que inexorablemente producen este tipo de contiendas internas entre partidos, sectores ideológicos y comandos de campaña candidaturales.
Tercero, una de las fortalezas más evidente del “otro candidato” -que la opera con ventajismo superlativo- es el manejo, derroche y despilfarro de recursos económicos –que de seguro tienen un origen del erario nacional-, el tema por ahora no es la naturaleza del caudal económico, sino la acumulación y acopio del mismo, esto le confiere al “otro candidato” una superioridad de prelación electoral. El candidato de la UNIDAD DEMOCRÁTICA desde ya no cuenta con el mismo fortín de recursos económicos, esta debilidad le acarrea ciertas limitaciones para la organización y realización de los eventos, giras y demás actividades que a nivel nacional se requieren para las movilizaciones, propagandas y publicidades. Se necesita de mayor tiempo para autogestionar recursos y poder realizar una campaña electoral sosegada, serena y austera; caso contrario, de tener escaso tiempo para la campaña electoral, la consecución de los recursos se volvería utópica, y la logística insuficiente llevaría a una inversión atropellada, intempestiva y con gastos inaprovechables.
Cuarto, se hace necesario y es justo además, realizar una campaña electoral donde se practique el recurso de la “domotecnia” (contacto personal casa por casa), la cercanía a las comunidades es vital, el acompañamiento permanente a los sectores urbanos es imprescindible, pero la relación directa con los poblados rurales y fronterizos se hace de obligatoriedad moral. Solo con un tiempo adecuado se pudiera realizar una agenda nacional donde el candidato de la UNIDAD DEMOCRÁTICA y su futuro equipo de gobierno pueda visitar, contactar y conocer las realidades locales de cada comunidad, e incluso repetir la misma cuantas veces se pueda. Con poco tiempo apenas visitaría los grandes poblados y ciudades más importantes desde el punto de vista social y económico.
Quinto, el “otro candidato” tiene un complejo de superioridad económica e ideológica dominadora que ha mantenido gracias al despilfarro de la chequera petrolera, este desafuero colonialista le ha despertado atracción en algunos gobiernos extranjeros, como también ha generado hostilidad irreconciliable en otros países. El candidato de la UNIDAD DEMOCRÁTICA necesita dedicarle un tiempo prudencial para visitar fugazmente algunos países o gobiernos extranjeros, presentar sus políticas internacionales, mostrar el verdadero rostro del país, exteriorizar la realidad venezolana, su proyección a futuro, y sobretodo originar en el concierto de las naciones el cambio de la concepción de Venezuela en el exterior de país castro-comunista, terrorista, violento y extremista; concepto antidemocrático totalmente alejado de la realidad del pueblo venezolano, que siempre se ha caracterizado por los valores de la libertad, dignidad humana y democracia participativa cuidadosa de la descentralización y del respeto a la separación de los poderes constituidos.
Sexto, hacerla entre los meses de septiembre y diciembre evocaría las dos fechas emblemáticas donde la oposición ha derrotado electoralmente al régimen chavista. El “2-D” comicios donde el pueblo soberano rechazó mayoritariamente la reforma constitucional, voluntad popular irrespetada por el “otro candidato” que a través de la aprobación de leyes anticonstitucionales impone su proyecto personalista para ahondar en su “revolución” plagada de corrupción y manejo doloso de la cosa pública. Y el “26-S” de reciente memoria, donde gracias a las marramuncias de los cambios circuitales electorales y la manipulación técnica de los mismos, con todo y el 52% de los votos a favor de la oposición se lograron menos curules en el parlamente nacional. Sería muy recomendable aprovechar el aniversario de una de estas dos fechas que han sido letales para el régimen chavista, para que en un día afín o cercano, se llevara a efecto las elecciones primarias tan anheladas y necesarias para logar la escogencia del candidato, que nos garantice la victoria electoral del 2012 y así salir de una vez por todas de la tragedia político-social llamada Hugo Chávez Frías, al que anteriormente hemos llamado el “otro candidato”.
Séptimo: Con lo que significará y aludirá en la historia el próximo año para la Venezuela contemporánea, tenemos que declarar a partir del 1º de Enero del 2012 como: “AÑO DE GRACIA PARA VENEZUELA”. Será el tiempo de celebrar los 360 años del acontecimiento de la Virgen de Coromoto en Guanare. Un año para la Patria donde reine la fuerza democrática, la unidad visible en espíritu y verdad, se mantenga el clima de oración fervorosa al Dios del amor y de la paz; y podamos aunar los criterios, punto de vista y pareceres distintos para emerger con una Venezuela posible, donde todos podamos participar y actuar en comunión fraterna y solidaria; así podemos convivir con una conciencia librepensadora, llena de dignidad y de fe, legado de nuestros heroicos ancestros y antepasados libertadores.
Queremos un 2012 sin rupturas, sin divisiones y sin traumas. Construyamos el nuevo templo espiritual coromotano. Dios lo bendice, la Virgen lo quiere y el pueblo de Venezuela lo realiza. Amén.
Primero, porque el “otro candidato” prácticamente desde 1.998 anda en campaña electoral de manera impolítica, inminente, excesiva, irrespetuosa, ilegal y anticonstitucional; muy a pesar de la política oficialista reciente de intentar refrescar su nombre e imagen retirándolos de las vallas, pancartas y avisos, su grosero y arbitrario uso, y abuso, en las cadenas presidenciales colapsa y avasalla los medios de comunicación con el reciclaje de las promesas electorales, que se tornan demagógicas, populistas y fraudulentas. Ante esta ventaja urge y necesita la UNIDAD DEMOCRÁTICA a través del futuro PRESIDENTE CONSTITUCIONAL expresar a toda la población venezolana de manera contundente y explícita el proyecto de País, Nación, Estado y Gobierno contenido en la Constitución Bolivariana de Venezuela de 1.999, proyecto que ha sido vapuleado, violado y abolido de hecho y fuera del derecho por el régimen autocrático y centralista del “otro candidato” que se quiere reelegir nuevamente después de más de una década en el poder.
Segundo, generalmente un proceso electoral a nivel de “primarias” genera una serie de fricciones internas, divergencias políticas, lesiones mediáticas y malestar partidista que para ser sanadas con madurez política y salud espiritual se hace necesario contar con el factor temporal justo, suficiente y razonable que permita la reconciliación y la armonía perfecta, para así mostrar la sensación y el testimonio cierto de la unidad, fraternidad y correlación de fuerzas con sentido plural y participativo. No se puede correr el riesgo de iniciar una campaña electoral con heridas políticas no cicatrizadas y mucho menos que destilen las gotas de los resentimientos, antipatías y aversiones que inexorablemente producen este tipo de contiendas internas entre partidos, sectores ideológicos y comandos de campaña candidaturales.
Tercero, una de las fortalezas más evidente del “otro candidato” -que la opera con ventajismo superlativo- es el manejo, derroche y despilfarro de recursos económicos –que de seguro tienen un origen del erario nacional-, el tema por ahora no es la naturaleza del caudal económico, sino la acumulación y acopio del mismo, esto le confiere al “otro candidato” una superioridad de prelación electoral. El candidato de la UNIDAD DEMOCRÁTICA desde ya no cuenta con el mismo fortín de recursos económicos, esta debilidad le acarrea ciertas limitaciones para la organización y realización de los eventos, giras y demás actividades que a nivel nacional se requieren para las movilizaciones, propagandas y publicidades. Se necesita de mayor tiempo para autogestionar recursos y poder realizar una campaña electoral sosegada, serena y austera; caso contrario, de tener escaso tiempo para la campaña electoral, la consecución de los recursos se volvería utópica, y la logística insuficiente llevaría a una inversión atropellada, intempestiva y con gastos inaprovechables.
Cuarto, se hace necesario y es justo además, realizar una campaña electoral donde se practique el recurso de la “domotecnia” (contacto personal casa por casa), la cercanía a las comunidades es vital, el acompañamiento permanente a los sectores urbanos es imprescindible, pero la relación directa con los poblados rurales y fronterizos se hace de obligatoriedad moral. Solo con un tiempo adecuado se pudiera realizar una agenda nacional donde el candidato de la UNIDAD DEMOCRÁTICA y su futuro equipo de gobierno pueda visitar, contactar y conocer las realidades locales de cada comunidad, e incluso repetir la misma cuantas veces se pueda. Con poco tiempo apenas visitaría los grandes poblados y ciudades más importantes desde el punto de vista social y económico.
Quinto, el “otro candidato” tiene un complejo de superioridad económica e ideológica dominadora que ha mantenido gracias al despilfarro de la chequera petrolera, este desafuero colonialista le ha despertado atracción en algunos gobiernos extranjeros, como también ha generado hostilidad irreconciliable en otros países. El candidato de la UNIDAD DEMOCRÁTICA necesita dedicarle un tiempo prudencial para visitar fugazmente algunos países o gobiernos extranjeros, presentar sus políticas internacionales, mostrar el verdadero rostro del país, exteriorizar la realidad venezolana, su proyección a futuro, y sobretodo originar en el concierto de las naciones el cambio de la concepción de Venezuela en el exterior de país castro-comunista, terrorista, violento y extremista; concepto antidemocrático totalmente alejado de la realidad del pueblo venezolano, que siempre se ha caracterizado por los valores de la libertad, dignidad humana y democracia participativa cuidadosa de la descentralización y del respeto a la separación de los poderes constituidos.
Sexto, hacerla entre los meses de septiembre y diciembre evocaría las dos fechas emblemáticas donde la oposición ha derrotado electoralmente al régimen chavista. El “2-D” comicios donde el pueblo soberano rechazó mayoritariamente la reforma constitucional, voluntad popular irrespetada por el “otro candidato” que a través de la aprobación de leyes anticonstitucionales impone su proyecto personalista para ahondar en su “revolución” plagada de corrupción y manejo doloso de la cosa pública. Y el “26-S” de reciente memoria, donde gracias a las marramuncias de los cambios circuitales electorales y la manipulación técnica de los mismos, con todo y el 52% de los votos a favor de la oposición se lograron menos curules en el parlamente nacional. Sería muy recomendable aprovechar el aniversario de una de estas dos fechas que han sido letales para el régimen chavista, para que en un día afín o cercano, se llevara a efecto las elecciones primarias tan anheladas y necesarias para logar la escogencia del candidato, que nos garantice la victoria electoral del 2012 y así salir de una vez por todas de la tragedia político-social llamada Hugo Chávez Frías, al que anteriormente hemos llamado el “otro candidato”.
Séptimo: Con lo que significará y aludirá en la historia el próximo año para la Venezuela contemporánea, tenemos que declarar a partir del 1º de Enero del 2012 como: “AÑO DE GRACIA PARA VENEZUELA”. Será el tiempo de celebrar los 360 años del acontecimiento de la Virgen de Coromoto en Guanare. Un año para la Patria donde reine la fuerza democrática, la unidad visible en espíritu y verdad, se mantenga el clima de oración fervorosa al Dios del amor y de la paz; y podamos aunar los criterios, punto de vista y pareceres distintos para emerger con una Venezuela posible, donde todos podamos participar y actuar en comunión fraterna y solidaria; así podemos convivir con una conciencia librepensadora, llena de dignidad y de fe, legado de nuestros heroicos ancestros y antepasados libertadores.
Queremos un 2012 sin rupturas, sin divisiones y sin traumas. Construyamos el nuevo templo espiritual coromotano. Dios lo bendice, la Virgen lo quiere y el pueblo de Venezuela lo realiza. Amén.
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